Tras la replicación del ADN, se puede llevar a cabo la división celular o fase M. La división celular, tanto en las células animales como en las vegetales, consta de dos procesos: la mitosis, en la que se produce la división del núcleo; y la citocinesis, que consiste en la división del citoplasma. El objeto de la división celular es producir dos células hijas con idéntico material genético.
La división celular consta de dos procesos: la mitosis y la citocinesis. |
- Mitosis
La mitosis, también llamada cariocinesis, tiene por objeto repartir de manera equitativa el material hereditario, que se ha duplicado en la fase S, entre las dos células hijas que se van a producir. Se divide en varias etapas sucesivas.
+ Profase
Se produce una condensación de la cromatina, y los cromosomas comienzan a hacerse visibles. Como ya se ha producido la replicación durante la fase S, cada uno está formado por dos cromátidas hermanas idénticas unidas por el centrómero.
En las células que tienen centríolos ya duplicados en la fase G2, estos comienzan a separarse hasta que se sitúan en polos opuestos de la célula. A medida que se separan los centríolos, se forman entre ellos -por polimerización de los microtúbulos del áster- los microtúbulos polares, que constituyen el huso acromático o huso mitótico.
La membrana nuclear y el nucléolo desaparecen, y los cromosomas se dispersan por el citoplasma.
En los centrómeros de cada cromosoma se forman los cinetocoros, a partir de los cuales se originan los microtúbulos cinetocóricos.
+ Metafase
Los cromosomas alcanzan el grado máximo de condensación.
El huso acromático está formado y se extiende entre los dos polos de la célula.
Los microtúbulos cinetocóricos empujan a los cromosomas de manera lenta y progresiva hasta situarlos en el plano medio del huso acromático, donde forman la placa ecuatorial o metafásica.
Los centrómeros se colocan perpendiculares al eje formado por los dos centriolos, de manera que cada una de las cromátidas que forman el cromosoma metafásico queda orientada hacia un polo.
+ Anafase
Las dos cromátidas de cada cromosoma inician, de forma simultánea, un movimiento de separación hacia polos opuestos arrastradas por los microtúbulos cinetocóricos, que se acortan por despolimerización. La separación de ambas cromátidas se inicia por el centrómero y de forma sincronizada en todos los cromosomas de la placa metafásica.
Los microtúbulos polares se alargan por polimerización y separan, cada vez más, los dos polos del huso acromático.
La anafase concluye cuando los cromosomas llegan a los polos.
+ Telofase
Los nucléolos reaparecen y los cromosomas comienzan a descondensarse, con lo que dejan de ser visibles.
La membrana nuclear reaparece alrededor de cada grupo de cromosomas, delimitándose así dos zonas nucleares; una en cada polo de la célula. Las membranas se forman a partir del retículo endoplásmico.
- Citocinesis
La división celular no termina con la mitosis; con ella se ha repartido la dotación genética de la célula, pero aún es necesario que el citoplasma se divida entre las dos células hijas y que los orgánulos citoplasmáticos se repartan de la manera más equitativa posible. Este proceso se denomina citocinesis, y ocurre de modo diferente en las células animales y vegetales.
+ La citocinesis en las células animales
En las células animales se produce un estrangulamiento que divide en dos a la célula madre. A la altura de la placa ecuatorial aparece un anillo contráctil formado por filamentos de actina y miosina. Este anillo se va estrechando, y origina un surco de segmentación que cada vez se hace más estrecho hasta que se produce el estrangulamiento total y la separación de las dos células hijas.
+ La citocinesis en las células vegetales
En las células vegetales, a la altura de la placa ecuatorial se forma un tabique de separación entre las dos células hijas denominado fragmoplasto. Se forma por fusión de las vesículas del aparato de Golgi -que contienen los componentes que originan la pared celular- y los restos de los microtúbulos que formaban el huso acromático. El fragmoplasto no se cierra completamente, sino que se halla perforado por finos puentes citoplasmáticos o plasmodesmos que aseguran la comunicación entre las dos células hijas.